Es una tarde hermosa, contemplo el bello mar
me llega la nostalgia, yo con ansias de dar
este caudal de sentimientos y de ternura
¡ Emociòn que me llena, de infinita locura !
Al preludio de la lluvia llegan nubarrones,
desatàndose fuerte, cual si fueran pasiones
pincelàndose el cielo de ese negro color
¡ Entonces llega a mì tu voz dàndome tu amor !
¡ Soy tuya ! Susurran en un mensaje las olas,
reteniendo ese clamor las bellas caracolas,
con rayos y truenos me lo dice el horizonte
pero es como si me cantara un tierno Zenzontle.
Siento en mi piel la lluvia cual gotas de rocìo,
erizado el cuerpo, me va llegando ese frìo,
pero en mi corazòn esa voz me va llenando
de dulce ilusiòn, porque en mì el amor va llegando.
Las gaviotas en su vuelo me gritan sin cesar
¡ Soy tuya ! La realidad me llena de pesar
entre el viento y la lluvia, la voz se va perdiendo
¡ Y siento que en mì, esa ilusiòn se va muriendo !
La inmensa necesidad de un cariño tener
y ver el ocaso, con la lluvia fenecer,
van dejando en mi alma, ese triste sentimiento
¡ Todo mi ser entero se llena de lamento !
Suave, sigilosamente a mì Tù vas llegando,
perdida en mis pensamientos, por dentro llorando
siento un vuelco en mi corazòn, al verte a mi lado
susurràndome al oìdo ¡ Cuànto me has amado !
¡ El mar, la lluvia, en la arena las caracolas
y tu voz musitando perdida entre las olas !
© AriaDna»
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